Acerca de la salida de Fidel
Bastantes páginas de diarios, imágenes en las noticias y bullados comentarios de cada uno de los cientistas políticos que en televisión hacen alarde de la necesidad de “transformar a Cuba en el país que por sus condiciones de turismo debió haber sido de no ser por la revolucion se han oido en el ultimo tiempo. Se escucha a numerosos comentaristas hablar acerca de la urgencia de eliminar las “dictaduras” en el Siglo XXI. Si incluso el presidente francés Nicolás Sarkozy envió su mensaje de transición a la democracia para los “pobres ciudadanos cubanos”. Todo eso ha pasado desde que Fidel Castro anunció que no se re postularía al puesto de Presidente del Consejo de Estado y Comandante en Jefe.
Fidel con esta acción, como en muchas otras ocasiones de cátedra acerca de la conducta que cualquier militante o compañero de la revolución debe presentar ya sea para llevar a los pueblos hacia esta o bien para mantenerla talo como lo ha hecho Cuba.
Los rastreros y miserables reaccionarios desde Miami celebran lo que para ellos viene a marcar el término de una época oscura y llena de imposiciones que iban en contra de su libertad de hacerse ricos y explotar a la gente.
Que celebra Miami? Absolutamente nada. La salida –voluntaria- de Fidel no es mas que otro paso en el camino del pueblo cubano hacia la meta final: el socialismo. Desde Miami solo las lágrimas de niños ricos caprichosos y aspirantes a burgueses se pueden escuchar, pero solo por poco tiempo –no mas que un par de días- ya que el canto de Cuba hacia la libertad plena se oye cada vez más fuerte y más cerca.
producto de esto, EEUU no hace más que sembrar ilusión; falsa ilusión, tan falsa como su democracia y su libertad. Las bases de la Revolución no están en los hombros de quien con honor y convicción la dirigió en conjunto de muchos otros, sino que más bien se sostiene sobre lo más firme que puede encontrar tan hermoso proceso: el apoyo de la clase trabajadora.
Es aquella clase la que llevó a cabo la primera victoria –y como en muchas otras luchas la más importante- en contra de la burguesía cubana que tenia a toda Cuba convertida en el burdel de los EEUU.
Bastantes páginas de diarios, imágenes en las noticias y bullados comentarios de cada uno de los cientistas políticos que en televisión hacen alarde de la necesidad de “transformar a Cuba en el país que por sus condiciones de turismo debió haber sido de no ser por la revolucion se han oido en el ultimo tiempo. Se escucha a numerosos comentaristas hablar acerca de la urgencia de eliminar las “dictaduras” en el Siglo XXI. Si incluso el presidente francés Nicolás Sarkozy envió su mensaje de transición a la democracia para los “pobres ciudadanos cubanos”. Todo eso ha pasado desde que Fidel Castro anunció que no se re postularía al puesto de Presidente del Consejo de Estado y Comandante en Jefe.
Fidel con esta acción, como en muchas otras ocasiones de cátedra acerca de la conducta que cualquier militante o compañero de la revolución debe presentar ya sea para llevar a los pueblos hacia esta o bien para mantenerla talo como lo ha hecho Cuba.
Los rastreros y miserables reaccionarios desde Miami celebran lo que para ellos viene a marcar el término de una época oscura y llena de imposiciones que iban en contra de su libertad de hacerse ricos y explotar a la gente.
Que celebra Miami? Absolutamente nada. La salida –voluntaria- de Fidel no es mas que otro paso en el camino del pueblo cubano hacia la meta final: el socialismo. Desde Miami solo las lágrimas de niños ricos caprichosos y aspirantes a burgueses se pueden escuchar, pero solo por poco tiempo –no mas que un par de días- ya que el canto de Cuba hacia la libertad plena se oye cada vez más fuerte y más cerca.
producto de esto, EEUU no hace más que sembrar ilusión; falsa ilusión, tan falsa como su democracia y su libertad. Las bases de la Revolución no están en los hombros de quien con honor y convicción la dirigió en conjunto de muchos otros, sino que más bien se sostiene sobre lo más firme que puede encontrar tan hermoso proceso: el apoyo de la clase trabajadora.
Es aquella clase la que llevó a cabo la primera victoria –y como en muchas otras luchas la más importante- en contra de la burguesía cubana que tenia a toda Cuba convertida en el burdel de los EEUU.
Distinción aparte merecen su educación y su salud. En Chile aquellos que hacen gárgara con la democracia son los mismos que mantienen a los habitantes de nuestro país en la ignorancia, teniendo esta como la mejor forma de mantenerse en el poder. Son los mismos que entregan subvenciones a colegios que no existen y a aquellos empresarios de la educación tan injustamente aplaudidos.
La educación cubana apela al desarrollo integro de los seres humanos no en beneficio propio sino que de los demás seres humanos, se es profesional no por dinero sino que por honor, y no por el honor de ser aclamado, sino que por algo todavía mas bello: el honor de servir a los demás.
Como dice Silvio Rodríguez “vivo en un país libre, tan solo como este puede ser libre…” no existe libertad en el capital y su libre mercado. Tan solo existe en el seno de la revolución que conlleva al socialismo. Y al pueblo cubano le gusta ser libre, y al igual que hace ya casi 50 años, pelearán a muerte por mantenerla. “sino puedo vivir en libertad moriré por conseguirla”.
En fin, la revolución socialista de Cuba seguirá avanzando hacia la profundización de este. Mientras tanto nosotros seguiremos peleando por llevarla a cabo en nuestro país, y al igual que siempre enviaremos nuestra solidaridad con todos los pueblos del mundo que sufren por las garras del capital.
No será fácil borrar el legado de Fidel del pueblo cubano, y por lo mismo no será tarea nada fácil quebrar el camino trazado hacia el socialismo.
A 50 años de la Revolución Cubana, el sol de América cubre cada vez más lugares cubiertos de oscuridad.
Hasta la victoria siempre y
hasta siempre comandante…
